JESÚ

ET bailaba solito en su cumpleaños.
Se enojaba con la risa diabólica de los demás.
Los miraba con desprecio.
Como si la gente hubiera caído desde un paquete de yerba.

Pensaba en volver a verlos nuevamente algún día..
Pero se conformaba con no verlos más. 
Y por eso,
se paró en medio de la pista de baile
y gritó para que lo escuchara 
todo el universo:

Viva la eutanasia!
Viva el aborto!
Viva el fetichismo ecléctico!.
Vivan los diabéticos!
Viva la cirrosis y el poder distintivo de los comunistas muertos!
Vivan los sueños despedazados 
que nos dejan los políticos de turno!
Viva la enfermedad diaria del monitor!
Viva tu vieja, y tu madrastra!
Viva la señora que ensucia tu raza!
Vivan las canciones de los catequistas pajeros!
Viva tu hermoso noviazgo y tu confusión!
Viva tu soledad y tus ganas de no estar!
Viva la concha de tu madre y la poronga de tu padre!

Vivan los que ya no viven
y por eso resisten viviendo.

Vivan los rosarios que se venden como amuleto.
Viva Retiro. Viva Congreso.
Viva la muerte, y viva el amanecer.
Vivan todos los hombres de este planeta tierra que nunca pudo crecer!

Viva yo!
Viva vos!

O sea, ET se dió cuenta que todo era un disparate. 
Bailar solo le hizo mal.
Y se fue a acostar 
sin mirar la tele.

El horario de protección al menor apareció.
Y la pornografía 
invadió la estúpida ciudad.

Tapando escuelas sin porvenir,
el sexo cayó como un Mesías. 
Y se bajoneó todo lo que tenías en la heladera...
Pidió un seca de porro y no le convidaron.

-Oh, Jesús. Al final eras un drogadicto.. Nos mentiste!! 


Gritó la que limpia los baños 
en la cancha de River.