lunes, 19 de septiembre de 2011

Vacaciones de las vacaciones del infierno


Realmente siento un muerto y un perro jugando dentro de mi cabeza.
Reconozco dos personas que me observan
Pero es tarde. Difícil arreglar la puerta
que rompiste en el cuello.
Te ví plantando humanos, cosechando sus huesos.
Pero es cómo imposible acercarme a ese recuerdo.
Si lo fusilé en Mar de Ajó.
El que conoció el odio fue recompensado por el olvido.
Ya está limpio tu instinto
y podés reforzarlo sin tener que usar
algunos de tus vicios

SOY mis ojos
en la noche sin montaña.
Es un poco de la buena excusa que fue haberte asesinado.
La mala suerte, el dolor,
las jaulas de carne,
y la tristeza
son pasajeros de este tren que nos lleva a “Absolutamente Nada”.
Y bajan mucho antes de llegar a ese lugar.

Te salta una bruja en tus hombros con cartas del pasado
Y te engañás con fantasmas que mañana
no estarán.
Las luces del patrullero se asoman y dejan el olor del ataúd.
Nosotros como ciegos
empezamos a nadar en la calle

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